La Ketamina es un analgésico general de acción rápida que requiere receta médica, su uso es tanto humano como animal, por lo que también el sector agro veterinario tiene sus propias regulaciones.
Se trata de un medicamento formado por Dimeticona y Guaiazulene, que se utiliza en el tratamiento sintomático de dolores derivados de malestares relacionados con el sistema digestivo, la Ketamina se usa clínicamente como un anestésico general, es considerado un anestésico manso.
Musk dijo en una entrevista que tenía una receta médica de Ketamina. El multimillonario calculó que toma "una pequeña cantidad cada dos semanas".
Elon Musk dijo que su prescripción de ketamina es beneficiosa para los inversores de Tesla y destacó que la droga le ayuda a gestionar un "estado químico negativo" similar a la depresión.
La Ketamina produce una anestesia que provoca bloqueo sensorial, induce a la sedación, amnesia e inmovilidad. Se usa para intervenciones diagnósticas o quirúrgicas que no requieran relajación muscular, como, por ejemplo: curas dolorosas o injertos de piel en los quemados, intervenciones de neurodiagnóstico, intervenciones en ojos, nariz y boca, extracciones dentarias, anestesia en pacientes de alto riesgo con bajos signos vitales, intervenciones ortopédicas, amputaciones, operaciones en el ano, quistes, circuncisión.
El consumo de Ketamina tiene que ser estrictamente médico, por lo que se recomienda tomar las consideraciones suscritas por un médico, pues el uso de esta droga se ha visto asociado a problemas graves, tanto físicos como mentales.
La ketamina puede causar:
- Depresión
- Delirio
- Amnesia
- Trastornos de las funciones motoras
- Presión arterial elevada
- Problemas respiratorios potencialmente mortales.
Esta sustancia tiene riesgos como la producción de ciertos efectos alucinógenos, según el Centro Nacional de Inteligencia sobre Drogas de Estados Unidos (NDIC por sus siglas en inglés).
Además de los riesgos asociados con la propia droga, las personas que la usan pueden exponerse al riesgo de agresiones sexuales
“Se informa que los agresores sexuales han usado la ketamina para incapacitar a sus víctimas, ya sea mezclándola con las bebidas de las víctimas desprevenidas u ofreciéndola a quienes consumen la droga sin comprender los efectos que producirá”, remata el NDIC.
