Se han perdido entre dos mil y dos mil 500 empleos en el sector de la construcción debido a la emergencia sanitaria y a la falta de inversión pública, informó Pascual González Ramírez, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), delegación Zacatecas.
Cerca de 35 empresas afiliadas a la organización cerraron por tiempo indefinido; algunas despidieron a sus trabajadores y otras llegaron a acuerdos diversos, dijo en entrevista.
El empresario estimó que el número de desempleados se multiplicará con la recién anunciada prolongación de la emergencia sanitaria hasta finales de mayo.
Más crítica será la situación de este sector –agregó- con la inminente suspensión obligatoria de las pocas obras (públicas y privadas) que se ejecutan en Zacatecas, ya que la mayoría de los proyectos no se consideran esenciales en la pandemia.
Sólo el 25 por ciento de las empresas afiliadas a la CMIC tiene actualmente un contrato de obra pública, la mayoría con la Secretaría de Comunicaciones y Trasportes (SCT) y el 10 por ciento con el gobierno estatal y municipios.
Recordó que a principios del 2020, se pronosticaba una recuperación luego de dos años de retroceso provocado por recortes presupuestales. Actualmente el panorama es más sombrío que el del 2019, que fue uno de los peores años para los constructores en las últimas décadas.
- “Sin inversión no saldremos del hoyo” -
González Ramírez explicó que el recurso estatal para obra es prácticamente inexistente, pues se depende casi de manera exclusiva de lo que envía la federación.
En una reunión reciente con el gobernador de Zacatecas, Alejandro Tello, la CMIC solicitó que, de haber algún recurso para infraestructura, lo asigne a través de contratos por invitación y así evitar más cierres y despidos.
Sin embargo reconoció que, en lo inmediato, esto de poco serviría si “se le prohíbe trabajar a los constructores” como parte de las medidas de la emergencia sanitaria.
Opinó que son positivos los apoyos anunciados por el gobierno estatal, como la suspensión de algunos impuestos y el otorgamiento de créditos, pero apuntó que estos no serían suficientes para rescatar a las constructoras.
A largo plazo, una vez concluida la emergencia sanitaria –dijo- sólo con inversión federal en infraestructura se podrá superar la crisis: “Si no hay recursos enviados al estado para obra, no habría forma de salir del hoyo en el que estamos”.
Al respecto agregó: “Lo que nos puede ayudar a los constructores es la reactivación de la infraestructura, porque si nos dan algún crédito, tal vez no podríamos pagarlo si en el futuro no se reactiva la obra pública”.
