Una caravana de campesinos de la zona frijolera del estado de Zacatecas, partió este miércoles rumbo a la Ciudad de México donde solicitarán al presidente, Andrés Manuel López Obrador, que declare al campo zacatecano como “zona de emergencia y desastre” por la sequía extrema.
Debido a la falta de lluvias, sólo se cosechará el 10% del frijol de otros años, es decir, apenas 35 mil toneladas, lo que provocará desabasto generalizado del alimento, según pronosticó Fernando Galván, líder de los frijoleros del norte del estado.
Al día de hoy, 50 de los 58 municipios del estado están clasificados en “sequía extrema” y el resto permanece en sequía severa, según el Monitor de Sequía publicado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Luego de que el contingente de cerca de 150 campesinos recibió la bendición de un sacerdote en la Catedral de Zacatecas, los campesinos dieron a conocer que ya se perdieron por lo menos mil 300 millones de pesos, tan sólo en la producción de frijol.
Estamos abandonados, nos sentimos tristes porque no tenemos un apoyo para sobrevivir y darle de comer a nuestras familias, estamos muy desesperados
Prevén que, en el camino rumbo a la capital, se unan al contingente, productores de Aguascalientes, Guanajuato y San Luis Potosí, donde también se padece el estiaje. Luego aclaró que este movimiento es legítimo: “no es nuestra intención que llegue a politizarse”.
Fernando Galván espera que López Obrador reciba personalmente, en Palacio Nacional, una carta de este contingente que dice representar a los 120 mil productores zacatecanos y en la que le exponen la problemática de lo que calificaron como la peor sequía de la que se tenga memoria.
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En la misma se solicita que instruya a los titulares de Gobernación, Protección Civil, Comisión Nacional del Agua, Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, Seguridad Alimentaria Mexicana y de la Comisión Federal de Electricidad, para que gestionen la declaratoria de zona de desastre y se canalicen los apoyos.
En el caso particular de la CFE, esperan una solución al problema de la cuota energética, ya que los propietarios de 12 mil pozos de riego enfrentan dificultades para pagar sus recibos.
Algunos de los manifestantes llevan en las manos, cráneos de bovinos que –dicen- abundan a las afueras de los municipios debido a que la falta de alimento por lo que está muriendo ganado: “Los agostaderos devastados, no hay pasto en los bordos, los abrevaderos se encuentran sólo al 30% de almacenamiento”.
