La reserva de agua subterránea sigue agotándose, por ello el Estado no debe renunciar a construir la presa Milpillas, expresó el director de la Junta Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado de Zacatecas (JIAPAZ), Benjamín de León Mojarro.
En el 2020 la Junta cerrará dos pozos: el Plata 1 y Plata 2 ubicados en el municipio de Guadalupe, ya que su vida útil concluyó.
Se espera poder sustituir el agua que se dejará de extraer de los pozos clausurados, mediante dos nuevos pozos: El Maguellito e Eremitorio que entrarían en operación en los meses próximos.
En entrevista el funcionario reconoció que Plata 1 y 2 no son las únicas fuentes del líquido que están en vías de agotamiento.
Debido a lo anterior en el año 2019 se pusieron en funcionamiento ocho pozos, a los que se sumarán cinco en el 2020, aunque aclaró que estas obras no solucionan el problema del déficit a largo plazo.
Benjamín de León advirtió que si se desiste el gobierno estatal, la concesión obtenida por Zacatecas de 47 millones de metros cúbicos para uso público urbano podría perderse, pues ello estaría dando la oportunidad a Jalisco o Nayarit de solicitarla.
“En el trascursos del año los organismos operadores de agua habremos de insistir en ello; somos los primeros interesados en que el proyecto sea reactivado de parte de los gobiernos federal y estatal”.
Destacó que mejor aprovechar las fuentes de agua superficial que las fuentes subterráneas, pues la calidad del agua es mejor, por ser menos pesadas, y su obtención es menos costosa.
El director de la JIAPAZ dijo confiar en que el gobierno estatal continuará con sus gestiones para solventar los obstáculos sociales que representan los grupos y ejidos que se oponen a la construcción de la presa.
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