Las diputadas y diputados federales aprobaron por consenso -con 457 votos a favor- el dictamen que reforma los artículos 17 y 18 de la Ley Agraria, para incorporar a las hijas de los ejidatarios dentro de la lista de las personas sucesoras de derechos sobre la parcela y en los demás inherentes a su calidad de ejidatario.
El dictamen de la Comisión de Desarrollo y Conservación Rural, Agrícola y Autosuficiencia Alimentaria de la Cámara Baja tiene el fin de reducir la brecha de desigualdad de género, brindar certeza jurídica a la titularidad de la tierra y empoderar económicamente a las mujeres rurales.
El documento refiere que existe una brecha de género que se presenta en el campo por la creciente migración laboral del hombre dejando espacio a una mayor cantidad de predios manejados por mujeres.
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Al fundamentar el dictamen, la legisladora del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Lourdes Erika Sánchez Martínez, comentó que se da un paso importante para reducir la brecha de desigualdad que viven las mujeres en el campo: “Queremos leyes que revindiquen su importante papel en los núcleos agrarios y sobre todo sean tomadas en cuenta en las decisiones más importantes de la comunidad, en igualdad de condiciones que los hombres”.
Es momento de reconocer que en nuestro país las mujeres somos claves para el desarrollo rural y la erradicación del hambre y la pobreza, por lo que es urgente alcanzar la equidad e impulsar su participación plena y efectiva en los procesos productivos y de organización comunitaria en igualdad de condicionesLourdes Erika Sánchez Martínez, legisladora federal (PRI).
A su vez, La diputada del Partido del Trabajo (PT), Clementina Marta Dekker Gómez, indicó que el dictamen proporciona a las mujeres rurales certeza jurídica en la tenencia de la tierra. “La tierra trabajada por mujeres ha tenido un incremento a través de los años generado en mayor medida por la migración de los hijos y padres de familia en busca de mejores condiciones de vida”.
Uno de los grandes retos que la mujer rural ha enfrentado durante años tiene que ver directamente con la pertenencia de la tierra y las dificultades que enfrenta al no contar con la titularidad de ella como, por ejemplo, el acceso a un crédito que le es negado.Clementina Marta Dekker Gómez, legisldora federal (PT)
El documento fue enviado al Senado de la República para sus efectos constitucionales.
