CHIHUAHUA, Chih.- Una sentencia de cuatro años de prisión, más el pago de una multa de 500 salarios, la reparación del daño al patrimonio del Estado y cuatro años inhabilitado para ocupar cargos del servicio público fue lo que recibió como condena Ricardo Yáñez Herrera, quien aceptó participar en la distracción de 246 millones de pesos en 2016 de la Secretaría de Educación, Cultura y Deporte que fueron utilizados para la campaña a gobernador del candidato del PRI, Enrique Serrano Escobar.

“Sí, señoría” respondió Ricardo Yáñez a la jueza María Guadalupe Hernández cuando le cuestionó si aceptaba la responsabilidad que se le atribuyó por parte del Ministerio Público durante la audiencia de procedimiento abreviado que se llevó a cabo ayer en la sede del poder judicial.

El próximo miércoles, a las 9 horas, se realizará la audiencia para lectura de sentencia, según lo convino la jueza encargada de la audiencia de procedimiento abreviado.

Los ocho meses que hasta hoy cumplió recluido bajo medida cautelar serán restados del tiempo total que se dictó de sentencia, es decir, deberá cumplir tres años y cuatro meses más al interior del centro penitenciario.

A diferencia del exalcalde Javier Garfio Pacheco, que también se sometió a un procedimiento abreviado, a Ricardo Yáñez Herrera no se le permitió continuar con su proceso en libertad. La audiencia se prolongó desde las 9:30 de la mañana hasta las 15 horas de ayer, y el ministerio público hizo un recuento de la acusación contra Ricardo Yáñez Herrera y las medidas de justificación que lo vincularon a proceso por el delito de peculado agravado.

Tras escuchar la exposición de la parte acusadora, y al constatar que entre la defensa del acusado, y la representación de la víctima (gobierno del estado) llegaron a un acuerdo luego de una negociación, la jueza aceptó el procedimiento abreviado y dictó la sentencia contra el exsecretario de Educación, Cultura y Deporte. Durante el desarrollo de la audiencia, se recordó cómo fue que se desviaron 246 millones de pesos del erario a través de la Secretaría de Educación, Cultura y Deporte, de la que estaba encargado Ricardo Yáñez en la parte final del periodo de César Duarte Jáquez como gobernador de Chihuahua.

Fue en el mes de febrero del 2016 que se instauraron cuatro contratos de servicio por talleres y capacitaciones así como el desarrollo de un software para la citada dependencia estatal, que nunca se concretaron ya que fueron compras simuladas para la distracción de los recursos públicos.

A través de cuatro distintos contratos: dos de 55 millones de pesos, uno de 46 millones y uno más de 90 millones fue que Ricardo Yáñez, en contubernio con otros servidores públicos, distrajeron 246 millones de pesos de la SECyD para financiar la campaña de Enrique Serrano Escobar.

Las empresas con las que se realizaron los contratos resultaron ser falsas, ya que están registradas con el mismo domicilio en Querétaro, y al tratar de hacer contacto con las mismas, nunca se pudo comprobar que realmente existieran.

De los servicios que se prestaron supuestamente, tampoco quedó registro alguno y además, se cuenta con testimoniales de servidores públicos que reprocharon un gasto superior a los 150 millones de pesos en capacitaciones, además de 90 millones de pesos para el desarrollo de un software.