El pasado viernes 11 de mayo, el presidente norteamericano volvió una vez más a lanzar amenazas directas hacia México sin que se tenga respuesta alguna por parte del gabinete de EPN, se nota el miedo que le tienen.
Trump manifestó en reunión con magnates de la industria automotriz de USA que el Tratado de Libre Comercio (TLC) es un desastre para la economía gringa, por lo que es necesario replantearlo.
Se tiene intención por parte de los ministros de economía de los tres países (México, USA y Canadá) presentar una propuesta para el próximo jueves 17 de mayo del 2018, aunque el presidente Trump manifiesta una y otra vez su posible cancelación.
La principal preocupación que tiene el presidente de USA es que la importación masiva de autos provenientes en su mayoría de México afecta la producción interna, desatacándose estados como Michigan, Ohio, Pensilvania, Carolina del Sur y Carolina del Norte.
Sería un duro golpe a la principal industria mexicana que da empleo a una cantidad significativa de trabajadores y es considerada como la industria estrella del actual presidente EPN.
De manera directa el primer mandatario Trump solicitó desde el viernes 11 de mayo del 2018 que se fabriquen y vendan más vehículos en USA, con ello se dejarían de importar más de 2 millones de autos fabricados en México.
Se sigue manifestando abiertamente en contra de la industria automotriz mexicana, la cual es para el presidente gringo causante de desempleo, déficit comercial y fuga de capital.
Esta amenaza es un llamado de atención al presidente EPN el cual manifiesta una y otra vez que México es incapaz de producir internamente los insumos para abastecer el mercado nacional, dejando al mercado la posibilidad de hacerlo, aunque como hemos visto en los últimos 10 años, el país mexicano es dependiente del exterior hasta para alimentarse.
Una posición errónea desde cualquier punto de vista, no se diga el económico.
La nueva amenaza de Trump se suma a la construcción del muro fronterizo, más lo que se acumule en los próximos días.
Desde nuestro punto de vista, compartimos la posición de un candidato que propone producir los alimentos para consumo de los mexicanos sin traerlos del exterior, sería una revitalización al malogrado campo mexicano que cada vez se rinde ante el embate de los países exteriores que le venden granos básicos para la alimentación básica de todos los mexicanos.
Pensar diferente a esta propuesta es seguir acumulando desaprobación de un 85% de los mexicanos hacia las políticas erróneas de EPN y seguir favoreciendo las ineficaces leyes del mercado.