/ miércoles 1 de abril de 2020

Referente periodístico │ Carta al gobernador

Señor C.P. Alejandro Tello Cristerna.

Gobernador de Zacatecas.

Presente.

El “monumento a la corrupción” construido en tiempos de MIGUEL ALONSO REYES, más allá del daño, el costo y enojo, que ha causado a la sociedad, en mi modesta opinión y de miles de zacatecanos, debería ser habilitado como un hospital ahora que hay la necesidad por la pandemia del coronavirus (serviría para el futuro). Más allá de los más de 400 millones de pesos que costó el Teatro “Toma de Zacatecas” no puede seguir como un elefante blanco.

Da coraje.

Insisto, más allá de la corrupción y la impunidad que se ha visto en esta obra, que también es la obra de la vergüenza, por lo menos, debería servir para algo, mi propuesta es que sea para un hospital, aunque consciente estoy que el funcionamiento no es el mejor porque es un teatro.

Pero rescátela para un hospital.

Estructuralmente y por su diseño, tal vez no sea lo más funcional, pero con algunas adecuaciones igual y se logra, tal vez no con los requerimientos que requiere un hospital, pero me parece que no debería quedar esa obra como está: en el olvido y cayéndose.

Urgen hospitales.

A GESTIONAR RECURSOS

También creo gobernador, que con una buena gestión de recursos extraordinarios, acudiendo personalmente con el presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, es muy probable, que pueda sensibilizarlo. Duele cada que uno pasa por esa obra ver el abandono en el que se encuentra.

Reflexione.

Desde luego, que no es sencillo en tiempos de la Cuarta Transformación ser escuchados, pero creo que, parte de la responsabilidad que tiene a cuestas es gestionar las veces que sea necesario los recursos que requiere Zacatecas, más allá del Presupuesto de Egresos formal.

Se puede gobernador.

De asumir ese enorme reto y desafío probablemente señor gobernador ya no le genere votos, pero sí la enorme satisfacción de haber rescatado un inmueble que tiene millones de pesos tirados a la basura. Apóyese en los legisladores federales, consciente que la forma de gestionar ha cambiado en la 4T. Vale más el reconocimiento que los votos en este momento.

¿No cree usted?

LO LEGAL QUE SIGA SU CURSO

Y como ese inmueble está observado señor gobernador, déjele a los órganos fiscalizadores hacer su chamba, pero sería magnífico rescatarlo para un hospital para las y los zacatecanos.

Anímese señor gobernador.

Para qué centrarse ahora en quién lo construyó, cuánto costó, porqué está abandonado. Mejor, gobernador, creo que gestionar recursos y habilitarlo ayuda más. Zacatecas como estado requiere de hospitales, doctores especialistas, enfermeras especializadas y personal altamente calificado para administrarlos. ¿No cree?

Piénsele señor.

En resumen, déjele a la justicia lo que vaya a pasar en esa obra por la vía jurídica, mejor, céntrese en el tiempo que le resta como gobernador a gestionar recursos extraordinarios para habilitar el monumento a la corrupción y la impunidad en un hospital. No es fácil, pero con tenacidad y buena gestión se puede. Que se quiera ya es otra cosa…

Es una opinión respetuosa.

Hasta mañana.

Señor C.P. Alejandro Tello Cristerna.

Gobernador de Zacatecas.

Presente.

El “monumento a la corrupción” construido en tiempos de MIGUEL ALONSO REYES, más allá del daño, el costo y enojo, que ha causado a la sociedad, en mi modesta opinión y de miles de zacatecanos, debería ser habilitado como un hospital ahora que hay la necesidad por la pandemia del coronavirus (serviría para el futuro). Más allá de los más de 400 millones de pesos que costó el Teatro “Toma de Zacatecas” no puede seguir como un elefante blanco.

Da coraje.

Insisto, más allá de la corrupción y la impunidad que se ha visto en esta obra, que también es la obra de la vergüenza, por lo menos, debería servir para algo, mi propuesta es que sea para un hospital, aunque consciente estoy que el funcionamiento no es el mejor porque es un teatro.

Pero rescátela para un hospital.

Estructuralmente y por su diseño, tal vez no sea lo más funcional, pero con algunas adecuaciones igual y se logra, tal vez no con los requerimientos que requiere un hospital, pero me parece que no debería quedar esa obra como está: en el olvido y cayéndose.

Urgen hospitales.

A GESTIONAR RECURSOS

También creo gobernador, que con una buena gestión de recursos extraordinarios, acudiendo personalmente con el presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, es muy probable, que pueda sensibilizarlo. Duele cada que uno pasa por esa obra ver el abandono en el que se encuentra.

Reflexione.

Desde luego, que no es sencillo en tiempos de la Cuarta Transformación ser escuchados, pero creo que, parte de la responsabilidad que tiene a cuestas es gestionar las veces que sea necesario los recursos que requiere Zacatecas, más allá del Presupuesto de Egresos formal.

Se puede gobernador.

De asumir ese enorme reto y desafío probablemente señor gobernador ya no le genere votos, pero sí la enorme satisfacción de haber rescatado un inmueble que tiene millones de pesos tirados a la basura. Apóyese en los legisladores federales, consciente que la forma de gestionar ha cambiado en la 4T. Vale más el reconocimiento que los votos en este momento.

¿No cree usted?

LO LEGAL QUE SIGA SU CURSO

Y como ese inmueble está observado señor gobernador, déjele a los órganos fiscalizadores hacer su chamba, pero sería magnífico rescatarlo para un hospital para las y los zacatecanos.

Anímese señor gobernador.

Para qué centrarse ahora en quién lo construyó, cuánto costó, porqué está abandonado. Mejor, gobernador, creo que gestionar recursos y habilitarlo ayuda más. Zacatecas como estado requiere de hospitales, doctores especialistas, enfermeras especializadas y personal altamente calificado para administrarlos. ¿No cree?

Piénsele señor.

En resumen, déjele a la justicia lo que vaya a pasar en esa obra por la vía jurídica, mejor, céntrese en el tiempo que le resta como gobernador a gestionar recursos extraordinarios para habilitar el monumento a la corrupción y la impunidad en un hospital. No es fácil, pero con tenacidad y buena gestión se puede. Que se quiera ya es otra cosa…

Es una opinión respetuosa.

Hasta mañana.