Zacatecas, Zac.- Lo que más le gusta de la vida es vivirla, yaque tiene sus altas y bajas, pero hay que disfrutarla, dijo elseñor Salvador Ríos.
Su padre le inculcó el gusto por hornear el pan, fue ahí dondecomenzó a interesarle el negocio, pues desde pequeño comenzó ajugar con la masa dándole como resultado el aprendizaje y unadiversión que para él, se convirtió en su mundo y hasta la fechaSalvador hace lo que más le gusta, con una larga trayectoria yexperiencia de conocer y preparar. Él no deja de aprender, RíosRaigoza se mantiene actualizado con las preparaciones y con losgustos de las personas que consumen desde años en su expendio depan en una colonia de la capital zacatecana.
Salvador Ríos Raigoza nos comentó en la entrevista que, losgustos en los consumidores han cambiado a pesar que algunos tiposde pan se mantienen hasta nuestros días y otros que las nuevasgeneraciones, ni en la vida se imaginan que existieron; ya que eneste oficio es necesario estarse actualizando con las novedades quehay, Salvador, se continua preparando con los cursos y talleres queofrecen los proveedores, aunque él dice y me permito citarlo “Enocasiones ellos son los que aprenden más, en vez de uno” entrerisas comenta. En la tradicionalpanadería trabajan parte de su familia, hijos, nueras y nietos queles interesó el negocio, con una variedad y rico pan, el expendiocontinúa trabajando de la mejor manera. Salvador,les dice a los lectores de El Sol de Zacatecas que comprenpan tradicional en las panaderías de su elección, porque asíapoyan a familias zacatecanas. Su servidora, se despide porque undelicioso vaso de leche para acompañar mi pan me espera, ¡nosleemos la próxima semana.
