Este año, será el 84 aniversario de que una turba agrediera y provocara la muerte de la maestra María Rodríguez Murillo, bajo los gritos de ¡Viva Cristo Rey!, en la comunidad de Huiscolco, Tabasco, Zacatecas, en la madrugada sábado 26 de octubre de 1935.
La turba, totalmente fuera de sí tomó a la mujer, la sacaron de su casa, la golpearon, la torturaron por horas, alguien le arrancó la blusa y con un cuchillo le mutiló los senos y, la llevaron amarrada con una soga de los pies y la arrastraron a galope de caballo a la entrada del pueblo, donde la dejaron tirada en el suelo, murió desangrada. La mujer tenía 45 años de edad.
El cura del pueblo, en la misa dominical absolvió de cualquier pecado o culpa a aquellos que participaron en el asesinato de María Rodríguez Murillo, acusada por el sacerdote de apoyar la reforma agraria y de tener en su poder textos de corte comunista (era material que utilizaba para sus clases).
En el acta de defunción de la profesora Murillo se lee: “En Villa García de la Cadena (hoy Tabasco, Zacatecas), a las diez horas del día 27 de octubre de 1935, ante mí, Ramón Martínez Preciado, juez del Registro Civil de este lugar, compareció el ciudadano Aurelio Rodríguez, viudo de 48 años de edad, agricultor, vecino de San Antonio y manifestó: Que ayer a las 7 horas falleció sacrificada sin asistencia médica su tía María R. Murillo, célibe de 45 años de edad hija de Higinio Rodríguez y Brígida Murillo; el cadáver fue inhumado en el panteón de este lugar en fosa de primera clase…”
