El equipo infantil de futbol Rayados Unión Jerez vivió una odisea inesperada la noche de ayer domingo, cuando el autobús en el que viajaban, junto con padres y maestros, quedó atrapado en el tramo carretero de Saín Alto a Río Frío, en Calera, Zacatecas, debido a los bloqueos realizados por miembros de un grupo delictivo que sembraron caos en la zona.
Estos jóvenes futbolistas regresaban de participar en la Copa Mazatlán 2024, donde alcanzaron el subcampeonato. Sin embargo, el regreso a casa se convirtió en una experiencia desafiante cuando se encontraron con el bloqueo en territorio zacatecano.
La tarde de ayer domingo se registró un intenso operativo policial en Saín Alto en el que se logró la captura de dos miembros de un grupo delictivo. Esto desencadenó una serie de balaceras y bloqueos en varias carreteras federales, incluyendo la 45, 49, 23 y 54, durante la noche.
Debido a esa situación, el autobús en el que viajaban los pequeños futbolistas no pudo continuar el viaje.
Los jugadores y sus acompañantes tuvieron que esperar pacientemente durante nueve horas a que se restableciera el tráfico en la carretera, sin embargo, a incertidumbre y la preocupación reinaban entre ellos.
La mañana de este lunes, algunos padres del equipo recurrieron a las redes sociales para informar que finalmente habían llegado a Jerez.
Describieron las nueve horas en medio de la nada como momentos de angustia y desesperación, para después llegar con los niños a salvo en casa.
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