/ viernes 6 de diciembre de 2019

Plan Nacional de Infraestructura, oportunidad de crecimiento para todos

A mediados de esta semana el presidente López Obrador anunció la primera etapa del Plan Nacional de Infraestructura, un acuerdo entre el gobierno y el sector productivo que representa una inversión privada de 859 mil millones de pesos en 147 proyectos, muchos de los cuales ya se encuentran en un proceso avanzado de gestión.

El Plan Nacional de Infraestructura es una oportunidad de oro para acelerar el crecimiento económico de nuestro país, ya que favorece la captación del talento nacional y la generación de nuevos empleos, y sobre todo se beneficia a miles de mipymes que podrán participar en la creación de nuevas cadenas de proveedores locales, necesarias para ejecutar en tiempo y forma los diferentes proyectos.

Además, una vez concluida esta primera etapa, la infraestructura generada permitirá un mayor flujo comercial y servirá a su vez para atraer más inversiones y el desarrollo de nuevas empresas, generando un círculo virtuoso de crecimiento económico y social.

Este acuerdo marcará el rumbo para los grandes proyectos de infraestructura durante los próximos años, en diferentes sectores como transporte, agropecuario, turístico, manufacturero, entre otros.

La presentación coincide con los reportes de INEGI de una ligera recesión de la economía, si bien es necesario destacar que dicha reducción es de sólo 0.1%, por lo que no es una tendencia significativa. De ahí la importancia y pertinencia de este acuerdo, que sentará las bases para detonar el crecimiento económico de nuestro país a corto y mediano plazo.

El anuncio ha sido bien recibido por la Asociación de Bancos de México (ABM), que ha señalado que se cuentan con los recursos necesarios para el financiamiento de estos proyectos, y por las agencias calificadoras, que esperan un repunte de la economía durante el próximo año.

Este plan se enmarca en las líneas generales trazadas en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024, que a la letra señala en el rubro de economía: “se alentará la inversión privada, tanto la nacional como la extranjera, y se establecerá un marco de certeza jurídica, honestidad, transparencia y reglas claras” y que “el sector público fomentará la creación de empleos mediante programas sectoriales, proyectos regionales y obras de infraestructura”.

Desde inicios, la administración de López Obrador se ha caracterizado por su énfasis en la trasparencia y el combate a la corrupción, así como programas con alto impacto social. El nuevo acuerdo con la iniciativa privada viene a complementar las estrategias necesarias para acelerar el desarrollo socioeconómico, que requiere la participación de todos los sectores y todos los mexicanos. Sin duda, la unión de esfuerzos entre el gobierno y el sector productivo es un importante paso en nuestro país, que beneficiará a mipymes y a la sociedad en general.

A mediados de esta semana el presidente López Obrador anunció la primera etapa del Plan Nacional de Infraestructura, un acuerdo entre el gobierno y el sector productivo que representa una inversión privada de 859 mil millones de pesos en 147 proyectos, muchos de los cuales ya se encuentran en un proceso avanzado de gestión.

El Plan Nacional de Infraestructura es una oportunidad de oro para acelerar el crecimiento económico de nuestro país, ya que favorece la captación del talento nacional y la generación de nuevos empleos, y sobre todo se beneficia a miles de mipymes que podrán participar en la creación de nuevas cadenas de proveedores locales, necesarias para ejecutar en tiempo y forma los diferentes proyectos.

Además, una vez concluida esta primera etapa, la infraestructura generada permitirá un mayor flujo comercial y servirá a su vez para atraer más inversiones y el desarrollo de nuevas empresas, generando un círculo virtuoso de crecimiento económico y social.

Este acuerdo marcará el rumbo para los grandes proyectos de infraestructura durante los próximos años, en diferentes sectores como transporte, agropecuario, turístico, manufacturero, entre otros.

La presentación coincide con los reportes de INEGI de una ligera recesión de la economía, si bien es necesario destacar que dicha reducción es de sólo 0.1%, por lo que no es una tendencia significativa. De ahí la importancia y pertinencia de este acuerdo, que sentará las bases para detonar el crecimiento económico de nuestro país a corto y mediano plazo.

El anuncio ha sido bien recibido por la Asociación de Bancos de México (ABM), que ha señalado que se cuentan con los recursos necesarios para el financiamiento de estos proyectos, y por las agencias calificadoras, que esperan un repunte de la economía durante el próximo año.

Este plan se enmarca en las líneas generales trazadas en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024, que a la letra señala en el rubro de economía: “se alentará la inversión privada, tanto la nacional como la extranjera, y se establecerá un marco de certeza jurídica, honestidad, transparencia y reglas claras” y que “el sector público fomentará la creación de empleos mediante programas sectoriales, proyectos regionales y obras de infraestructura”.

Desde inicios, la administración de López Obrador se ha caracterizado por su énfasis en la trasparencia y el combate a la corrupción, así como programas con alto impacto social. El nuevo acuerdo con la iniciativa privada viene a complementar las estrategias necesarias para acelerar el desarrollo socioeconómico, que requiere la participación de todos los sectores y todos los mexicanos. Sin duda, la unión de esfuerzos entre el gobierno y el sector productivo es un importante paso en nuestro país, que beneficiará a mipymes y a la sociedad en general.