San Pascual Baylón (también escrito como San Pascual Bailón), nació el 16 de mayo de 1540 en Torrehermosa, Zaragoza, España, hijo de campesinos durante sus primeros años de vida se dedicó al campo y al pastoreo, pero a los 24 años de edad decidió unirse a la Orden de los Hermanos Menores, fundada por San Francisco de Asís. Es conocido por ser el santo patrono de los y las cocineras y chefs.
Ya dentro del monasterio se desempeñaba como barrendero, jardinero, portero, mandadero y cocinero.
San Pascual Bailón es el santo protector de los fogones y de los accidentes dentro de la cocina, en las cocinas mexicanas se le suele solicitar ayuda para a la hora de preparar alimentos para que sean del gusto de los comensales y para evitar accidentes mientras se está cocinando.
Según la tradición cristiana, se cuenta que en una ocasión un grupo de pastores oyeron gritar a Pascual, “¡Allí viene, allí está!”, y es que Jesús, en forma de estrella, había visitado a Pascual.
Fue a partir de ese momento que decidió ingresar a la Orden de los Hermanos Menores.
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También, se dice que muchas veces ángeles lo visitaban en su cocina mientras preparaba alimentos, y en sus ratos libres acudía a visitar a la Virgen María, a quien le ofrecía danzas a manera de ofrenda.
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Algunas de las oraciones con las que se le suele invocar al santo a la hora de cocinar son:
“San Pascualito Bailón, báilame en este fogón. Tú me pones la sazón y yo te bailo un danzón”
“San Pascual Bailón, que por ollas y cazuelas brincas, corres, casi vuelas, dale a mi guiso sazón”
