/ martes 10 de diciembre de 2019

La Virgen de Guadalupe

Estamos a dos días de rendir homenaje a la emperatriz de América, la Virgen de Guadalupe. Un día de fiesta para todos los mexicanos y creyentes sobre todo por el significado histórico que nos lleva cada año a venerar a la Morenita del Tepeyac. Como referencia es importante destacar que a partir del Nican mopohua escrito en idioma náhuatl, desde que se descubrió en el siglo XVI, se han hecho varias traducciones. Además de la tradición oral en la cual ha perdurado la historia del milagro guadalupano que ha alcanzado tal popularidad y sobrepasado fronteras.

Deseo recomendar un libro titulado “La Virgen de Guadalupe, una biografía” de Javier Villalpando hacer referencia como alguien que ha participado en el devenir nacional a lo largo de 500 años.

La primera aparición sucedida un sábado 9 de diciembre de 1531 muy de mañana; en la ladera poniente muy cerca de la cumbre del cerro del Tepeyac. Juan Diego escucha su nombre y el llamado que le hace la Santísima Virgen, al llegar a donde ella estaba rodeada de luz, entabla un diálogo en el que la señora expresa que es su deseo se le erija un templo donde mostrar y dar su amor.

La segunda aparición se da el mismo 9 de diciembre de 1531 por la tarde, en la misma ladera cerca del cerro del Tepeyac. Juan Diego encuentra de nuevo a la Virgen María quien lo espera y éste le informa sobre el fracaso de su misión, puesto el obispo no le cree el relato. Lo juzga producto de la imaginación de Juan Diego, la Virgen le ratifica su confianza y lo envía de nuevo a insistirle al obispo para que vuelva al día siguiente a informarle.

La tercera aparición sucede el domingo 10 de diciembre de 1531 por la tarde, muy cerca de la cumbre del cerro del Tepeyac. Juan Diego encuentra a la Virgen y le comunica que el obispo exige una señal para cerciorarse que efectivamente es la madre de dios quien lo envía y le pide un templo. La Virgen cita a Juan Diego para el día siguiente con el fin de darle la señal que convencería al obispo Fray Juan de Zumárraga.

La cuarta aparición sucedida el martes 12 de diciembre de 1531 por la mañana en el llano contiguo a la ladera oriente del cerro del Tepeyac. Ese mismo día muy de madrugada salió para buscar un confesor que administrara los últimos sacramentos al enfermo y quiso evitar encontrarse a la Virgen para no perder tiempo. La madre de Dios acepta los motivos del indio Juan Diego y le dice que no se aflija que su tío ya había sanado que no tenía nada que temer. Le dio instrucciones para que fuera al sitio en el que se habían encontrado las tres primeras veces y recogiera cuanta flor viera y encontrara, regresó al llano para dárselas a la Virgen la cual dijo que sólo las mostrara ante la presencia del obispo y nadie más, lo demás es historia.

Hoy la Virgen de Guadalupe está más vigente que nunca en el corazón de los mexicanos para ver por nosotros los mexicanos….

Estamos a dos días de rendir homenaje a la emperatriz de América, la Virgen de Guadalupe. Un día de fiesta para todos los mexicanos y creyentes sobre todo por el significado histórico que nos lleva cada año a venerar a la Morenita del Tepeyac. Como referencia es importante destacar que a partir del Nican mopohua escrito en idioma náhuatl, desde que se descubrió en el siglo XVI, se han hecho varias traducciones. Además de la tradición oral en la cual ha perdurado la historia del milagro guadalupano que ha alcanzado tal popularidad y sobrepasado fronteras.

Deseo recomendar un libro titulado “La Virgen de Guadalupe, una biografía” de Javier Villalpando hacer referencia como alguien que ha participado en el devenir nacional a lo largo de 500 años.

La primera aparición sucedida un sábado 9 de diciembre de 1531 muy de mañana; en la ladera poniente muy cerca de la cumbre del cerro del Tepeyac. Juan Diego escucha su nombre y el llamado que le hace la Santísima Virgen, al llegar a donde ella estaba rodeada de luz, entabla un diálogo en el que la señora expresa que es su deseo se le erija un templo donde mostrar y dar su amor.

La segunda aparición se da el mismo 9 de diciembre de 1531 por la tarde, en la misma ladera cerca del cerro del Tepeyac. Juan Diego encuentra de nuevo a la Virgen María quien lo espera y éste le informa sobre el fracaso de su misión, puesto el obispo no le cree el relato. Lo juzga producto de la imaginación de Juan Diego, la Virgen le ratifica su confianza y lo envía de nuevo a insistirle al obispo para que vuelva al día siguiente a informarle.

La tercera aparición sucede el domingo 10 de diciembre de 1531 por la tarde, muy cerca de la cumbre del cerro del Tepeyac. Juan Diego encuentra a la Virgen y le comunica que el obispo exige una señal para cerciorarse que efectivamente es la madre de dios quien lo envía y le pide un templo. La Virgen cita a Juan Diego para el día siguiente con el fin de darle la señal que convencería al obispo Fray Juan de Zumárraga.

La cuarta aparición sucedida el martes 12 de diciembre de 1531 por la mañana en el llano contiguo a la ladera oriente del cerro del Tepeyac. Ese mismo día muy de madrugada salió para buscar un confesor que administrara los últimos sacramentos al enfermo y quiso evitar encontrarse a la Virgen para no perder tiempo. La madre de Dios acepta los motivos del indio Juan Diego y le dice que no se aflija que su tío ya había sanado que no tenía nada que temer. Le dio instrucciones para que fuera al sitio en el que se habían encontrado las tres primeras veces y recogiera cuanta flor viera y encontrara, regresó al llano para dárselas a la Virgen la cual dijo que sólo las mostrara ante la presencia del obispo y nadie más, lo demás es historia.

Hoy la Virgen de Guadalupe está más vigente que nunca en el corazón de los mexicanos para ver por nosotros los mexicanos….