Desde el inicio de régimen del Presidente López Obrador se observa en medios periodísticos y redes sociales un notorio incremento en noticias, opiniones y mensajes en redes sociales de las dos corrientes ideológicas históricamente contrarias: conservadores o derecha frente a una izquierda. En este proceso electoral 2024 se percibe un conflicto en aumento, con falsedades y cada vez más fanatizado como son actividades. Se afirma de inversión multimillonaria para atacar mediante guerra sucia a grupos políticos contrarios con cientos de miles de “bots”(cuentas falsas automatizadas).
Es necesario que estrategas y grupos con capacidad de decisión de ambas corrientes entiendan que la dinámica de confrontación en medios masivos de comunicación genera indeseable polarización en la sociedad mexicana. En el caso de periodismo ya están bien definidas las líneas editoriales y noticiosas consistentes en lograr una opinión pública contraria a la figura presidencial o a su favor, en redes sociales vemos que hay personas que no tienen tanta riqueza monetaria pero sienten y piensan igual que grandes empresarios y escriben con saña y odio, muchas de las ocasiones no conocen bien del tema como para hacer un comentario lo más certero posible. Esto es parte de una estrategia política basada en medios donde gente con poder económico y militantes de partidos anteriormente en el gobierno, procuran desprestigiar a todo lo que sea y emane de la cuarta transformación (4T) para que la clases media y baja cambien su forma de pensar y orientación del voto este 2024, consideran un logro parcial el “tener mayor número de mensajes en redes sociales contra AMLO que a favor”.
Por su parte las fuerzas afines a AMLO y la 4T también realizan comentarios de crítica destructiva, pero no escriben múltiples propuestas de desarrollo local, regional o nacional.
Está bien que la clase alta se manifieste, como también las clases populares, ello es un reflejo de libertad de expresión, de visiones diferentes en torno a gobernanza.
Es fundamental que entre derecha e izquierda exista un contexto de tolerancia, respeto a las ideas diferentes. Por el bien del país se debe diseñar y establecer un modelo de diálogo directo y diversificado, coordinado principalmente por el INE, el Tribunal Electoral, sector social, y partidos. Es menester hacer opiniones basadas en reconocerse como diferentes pero siempre procurar diálogo con ética desde ahora antes de tener una situación de alto conflicto este 2024.
