/ jueves 18 de enero de 2024

Discurso antiinmigrante de Donald Trump

En el proceso estadounidense para elegir a quien será su próximo presidente este 2024, nuevamente se utiliza el discurso antinmigrante como tradicional estrategia de mercadotecnia político-electoral, con ello la clase política busca llamar la atención de un importante segmento del electorado de ese país y sumar más simpatizantes y en su caso votantes.

Esta artimaña electoral que entre otros la vuelven a utilizar electoralmente el ex–presidente Donald Trump y el Gobernador de Florida Ron de Santis, ambos miembros del conservador partido republicano. Incluso Donald Trump argumenta cerrar la frontera de Estados Unidos (EEUU) con México (https://www.eleconomista.com.mx/internacionales/Vamos-a-cerrar-la-frontera-amaga-un-Trump-envalentonado-20240116-0115.html), argumentando factores negativos ocasionados por la ola de inmigrantes que se encaminan y de miles que ya están en la frontera esperando resolución gubernamental estadounidense favorable para radicar en ese vecino país.

El problema para migrantes que tienen anhelo de lograr una vida mejor respecto a sus países de origen es que se les propicia un ambiente de fobia. También con esta ideología se excluyen de alguna manera a ciudadanos extranjeros dentro y fuera del territorio estadounidense y sean considerados indeseables tanto para radicar en EEUU o para establecer vínculos interpersonales.

Por otro lado, la propuesta de Donald Trump resulta improcedente, pues la frontera EEUU-México es una de las más transitadas diariamente en el planeta, ambos países tienen alto grado de comercio entre si desde compras pequeñas por personas y familias que sumadas resultan en muy importantes cantidades monetarias por día, también afectaría exportaciones e importaciones de alto volumen también diariamente y por ende de transacciones financieras multimillonarias.

Sería muy benéfico para México que nuestro gobierno federal y los estatales fronterizos cierren las puertas al tráfico ilegal de armas para ser utilizadas por grupos delincuenciales en nuestro territorio, aún y cuando los fabricantes estadounidenses de armas estén amparados por la justicia de ese país para vender armas que llegan a nuestro país.

Es desalentador y preocupante que por fines electoreros la clase política estadounidense, como el señor Donald Trump, retome nuevamente un ambiente antinmigrante sin pensar objetivamente en los efectos colaterales y múltiples para EEUU y México.

En el proceso estadounidense para elegir a quien será su próximo presidente este 2024, nuevamente se utiliza el discurso antinmigrante como tradicional estrategia de mercadotecnia político-electoral, con ello la clase política busca llamar la atención de un importante segmento del electorado de ese país y sumar más simpatizantes y en su caso votantes.

Esta artimaña electoral que entre otros la vuelven a utilizar electoralmente el ex–presidente Donald Trump y el Gobernador de Florida Ron de Santis, ambos miembros del conservador partido republicano. Incluso Donald Trump argumenta cerrar la frontera de Estados Unidos (EEUU) con México (https://www.eleconomista.com.mx/internacionales/Vamos-a-cerrar-la-frontera-amaga-un-Trump-envalentonado-20240116-0115.html), argumentando factores negativos ocasionados por la ola de inmigrantes que se encaminan y de miles que ya están en la frontera esperando resolución gubernamental estadounidense favorable para radicar en ese vecino país.

El problema para migrantes que tienen anhelo de lograr una vida mejor respecto a sus países de origen es que se les propicia un ambiente de fobia. También con esta ideología se excluyen de alguna manera a ciudadanos extranjeros dentro y fuera del territorio estadounidense y sean considerados indeseables tanto para radicar en EEUU o para establecer vínculos interpersonales.

Por otro lado, la propuesta de Donald Trump resulta improcedente, pues la frontera EEUU-México es una de las más transitadas diariamente en el planeta, ambos países tienen alto grado de comercio entre si desde compras pequeñas por personas y familias que sumadas resultan en muy importantes cantidades monetarias por día, también afectaría exportaciones e importaciones de alto volumen también diariamente y por ende de transacciones financieras multimillonarias.

Sería muy benéfico para México que nuestro gobierno federal y los estatales fronterizos cierren las puertas al tráfico ilegal de armas para ser utilizadas por grupos delincuenciales en nuestro territorio, aún y cuando los fabricantes estadounidenses de armas estén amparados por la justicia de ese país para vender armas que llegan a nuestro país.

Es desalentador y preocupante que por fines electoreros la clase política estadounidense, como el señor Donald Trump, retome nuevamente un ambiente antinmigrante sin pensar objetivamente en los efectos colaterales y múltiples para EEUU y México.