/ domingo 14 de abril de 2024

Primeros 15 días de campaña

En los primeros quince días de campaña, he recorrido varios rincones de Zacatecas junto a nuestros candidatos del PAN y de la coalición Fuerza y Corazón por México. A lo largo de este camino, he sido testigo del apoyo que la gente brinda a nuestras propuestas, pero, más allá de eso, he confrontado la cruda realidad que azota a nuestro querido estado, resultado de un gobierno que ha olvidado a los suyos.

El apoyo que reciben nuestros candidatos no es solo un voto de confianza en ellos, sino también un claro mensaje de hartazgo con la situación actual. Las carencias son grandes y visibles. Las historias de abandono que escucho en cada parada son fuertes y muestran una falta de atención por parte del gobierno que no podemos seguir tolerando.

Al recorrer el estado, es evidente el abandono de nuestras carreteras, las cuales se encuentran destruidas, y esto resulta más indignnate cuando el gobierno estatal ha decidido gastar 3,500 millones de pesos en una obra innecesaria en la capital. Esta desconexión con lo que realmente necesita la gente es preocupante. ¿Cómo es que se justifica tal gasto cuando faltan cosas básicas en nuestras comunidades?

La falta de medicinas es alarmante, los centros de salud y escuelas sufren de un grave abandono, y la situación en el campo evidencia una falta de apoyo que ha dejado a nuestros agricultores en una posición vulnerable. Estos problemas son pruebas irrefutables de que hemos perdido el rumbo, descuidando las necesidades básicas y esenciales de nuestra gente. A esto se suma la inseguridad, que se ha instalado como una constante preocupante en todos nuestros municipios. Este escenario no solo revela un profundo descuido, sino que también subraya la urgencia de implementar el cambio significativo que estamos proponiendo.

Nuestros candidatos se enfrentan a una dura batalla contra la maquinaria gubernamental y contra aquellos que, desde sus posiciones de poder, intentan mantener las cosas como están. Sin embargo, es evidente que la ciudadanía se da cuenta de ello y está lista para apoyar un cambio verdadero.

No buscamos un cheque en blanco. Solo queremos la oportunidad de corregir el rumbo y demostrar que un gobierno puede, de verdad, colaborar estrechamente con sus ciudadanos. El cambio está a nuestro alcance; ahora es el momento de actuar para construir el Zacatecas que nos merecemos.

Vivimos en un estado de primera pero con un gobierno de cuarta. Es inaceptable que aquellos en el poder no estén a la altura de la gente a la que deben servir. Ahora, más que nunca, cada uno de nosotros juega un papel clave. Más allá de las promesas y los discursos, cada voto puede cambiar el futuro de nuestro estado. Te invito a que te informes bien, que preguntes y que te involucres de lleno en estas elecciones. No dejemos pasar más oportunidades. Es hora de actuar; el cambio no solo es necesario, es urgente.

En los primeros quince días de campaña, he recorrido varios rincones de Zacatecas junto a nuestros candidatos del PAN y de la coalición Fuerza y Corazón por México. A lo largo de este camino, he sido testigo del apoyo que la gente brinda a nuestras propuestas, pero, más allá de eso, he confrontado la cruda realidad que azota a nuestro querido estado, resultado de un gobierno que ha olvidado a los suyos.

El apoyo que reciben nuestros candidatos no es solo un voto de confianza en ellos, sino también un claro mensaje de hartazgo con la situación actual. Las carencias son grandes y visibles. Las historias de abandono que escucho en cada parada son fuertes y muestran una falta de atención por parte del gobierno que no podemos seguir tolerando.

Al recorrer el estado, es evidente el abandono de nuestras carreteras, las cuales se encuentran destruidas, y esto resulta más indignnate cuando el gobierno estatal ha decidido gastar 3,500 millones de pesos en una obra innecesaria en la capital. Esta desconexión con lo que realmente necesita la gente es preocupante. ¿Cómo es que se justifica tal gasto cuando faltan cosas básicas en nuestras comunidades?

La falta de medicinas es alarmante, los centros de salud y escuelas sufren de un grave abandono, y la situación en el campo evidencia una falta de apoyo que ha dejado a nuestros agricultores en una posición vulnerable. Estos problemas son pruebas irrefutables de que hemos perdido el rumbo, descuidando las necesidades básicas y esenciales de nuestra gente. A esto se suma la inseguridad, que se ha instalado como una constante preocupante en todos nuestros municipios. Este escenario no solo revela un profundo descuido, sino que también subraya la urgencia de implementar el cambio significativo que estamos proponiendo.

Nuestros candidatos se enfrentan a una dura batalla contra la maquinaria gubernamental y contra aquellos que, desde sus posiciones de poder, intentan mantener las cosas como están. Sin embargo, es evidente que la ciudadanía se da cuenta de ello y está lista para apoyar un cambio verdadero.

No buscamos un cheque en blanco. Solo queremos la oportunidad de corregir el rumbo y demostrar que un gobierno puede, de verdad, colaborar estrechamente con sus ciudadanos. El cambio está a nuestro alcance; ahora es el momento de actuar para construir el Zacatecas que nos merecemos.

Vivimos en un estado de primera pero con un gobierno de cuarta. Es inaceptable que aquellos en el poder no estén a la altura de la gente a la que deben servir. Ahora, más que nunca, cada uno de nosotros juega un papel clave. Más allá de las promesas y los discursos, cada voto puede cambiar el futuro de nuestro estado. Te invito a que te informes bien, que preguntes y que te involucres de lleno en estas elecciones. No dejemos pasar más oportunidades. Es hora de actuar; el cambio no solo es necesario, es urgente.