/ domingo 27 de septiembre de 2020

Crónica del poder │ Disciplina o lealtad a ciegas

La consigna del presidente Andrés Manuel López Obrador para sus funcionarios y servidores públicos de la cuarta transformación, ha sido muy clara y más directa, todos los aspirantes a un puesto de elección popular deben renunciar al gobierno, tienen hasta octubre, no más. No quiero que a la sombra del gobierno se promuevan candidaturas, "como era antes." Tienen que ser elecciones limpias y libres, nada de manipulaciones, que no se utilice el gobierno para favorecer a partidos y candidatos.

Ha sido un mensaje que derivado hacia Zacatecas, pronto se entendió pero nadie atendió todavía. Te lo digo a tí Ricardo, para que lo entiendan David o Saúl. El Coordinador de Ganadería toma su tiempo, no tiene prisa, y como no hay respuestas entre los servidores públicos de Morena, lo más seguro es que todavía no hay definición sobre la candidatura a gobernador, y van a esperar a que concluya el proceso de elección de la dirigencia nacional con la feroz disputa entre Porfirio Muñoz Ledo, Mario Delgado y Yeidckol Polevnsky. Un suspenso que da esperanzas a Luis Medina, José Narro, Geovanna Bañuelos, Ulises Mejía y Javier Calzada.

Lo más probable es que la clamorosa victoria electoral del 2018 no se repita, para Morena la contienda ya no será tan fácil, porque las nuevas emociones federalistas ya construyen consensos y acuerdos para establecer un solo frente unitario y capaz de una competencia poder a poder, como así proceden las dirigencias de los partidos PAN, PRI, PRD y MC, que en Zacatecas ya se consolida y adelantan en la carrera con Adolfo Bonilla, el más probable candidato de esa unidad, definición que se afina por los Alejandros Tello y Moreno, el gobernador y el dirigente nacional del PRI, con la aceptación y aprobación de los dirigentes nacionales aliados.

El partido Morena ya parece ratificar a sus aliados del PT, PES, hasta los Verdes de Carlos Puente, una alianza de grandes dimensiones, aunque poco homogénea. De confirmarse y formalizarse la estrategia, es previsible un choque de trenes que puede dejar regazón de cadáveres políticos de ambos lados. Por lo pronto, ésta fuerza avalada desde el poder presidencial, parece no tener prisa y lo más peligroso es que las facciones en la lucha por dirigir a Morena, pueden provocar dolorosos rompimientos, lo que ya motiva razonable preocupación al líder máximo Andrés Manuel López Obrador.

Lealtad a ciegas pide el Presidente

A su gabinete, legisladores y correligionarios para construir el proyecto de transformación, y al mismo tiempo se dirige a sus adversarios y conservadores, a los gobernadores de los estados, que eviten el derroche y no desviar los recursos presupuestales para las elecciones 2021. Asegura que todos los estados han recibido el presupuesto federal que les corresponde, pero en el caso de Zacatecas, Alejandro Tello acaba de precisar que solo ha recibido 300 millones, no hay cumplimiento al compromiso de mil millones más. Pero lo cierto es que, ese perseverante regateo del gobierno federal al estado, tiene que ver con la estrategia político electoral, o sea, impedir que se tengan recursos para aplicarlos en apoyo a partidos y candidatos, es el sospechosismo que le permite justificar, decirles que no hay más dinero.

La consigna del presidente Andrés Manuel López Obrador para sus funcionarios y servidores públicos de la cuarta transformación, ha sido muy clara y más directa, todos los aspirantes a un puesto de elección popular deben renunciar al gobierno, tienen hasta octubre, no más. No quiero que a la sombra del gobierno se promuevan candidaturas, "como era antes." Tienen que ser elecciones limpias y libres, nada de manipulaciones, que no se utilice el gobierno para favorecer a partidos y candidatos.

Ha sido un mensaje que derivado hacia Zacatecas, pronto se entendió pero nadie atendió todavía. Te lo digo a tí Ricardo, para que lo entiendan David o Saúl. El Coordinador de Ganadería toma su tiempo, no tiene prisa, y como no hay respuestas entre los servidores públicos de Morena, lo más seguro es que todavía no hay definición sobre la candidatura a gobernador, y van a esperar a que concluya el proceso de elección de la dirigencia nacional con la feroz disputa entre Porfirio Muñoz Ledo, Mario Delgado y Yeidckol Polevnsky. Un suspenso que da esperanzas a Luis Medina, José Narro, Geovanna Bañuelos, Ulises Mejía y Javier Calzada.

Lo más probable es que la clamorosa victoria electoral del 2018 no se repita, para Morena la contienda ya no será tan fácil, porque las nuevas emociones federalistas ya construyen consensos y acuerdos para establecer un solo frente unitario y capaz de una competencia poder a poder, como así proceden las dirigencias de los partidos PAN, PRI, PRD y MC, que en Zacatecas ya se consolida y adelantan en la carrera con Adolfo Bonilla, el más probable candidato de esa unidad, definición que se afina por los Alejandros Tello y Moreno, el gobernador y el dirigente nacional del PRI, con la aceptación y aprobación de los dirigentes nacionales aliados.

El partido Morena ya parece ratificar a sus aliados del PT, PES, hasta los Verdes de Carlos Puente, una alianza de grandes dimensiones, aunque poco homogénea. De confirmarse y formalizarse la estrategia, es previsible un choque de trenes que puede dejar regazón de cadáveres políticos de ambos lados. Por lo pronto, ésta fuerza avalada desde el poder presidencial, parece no tener prisa y lo más peligroso es que las facciones en la lucha por dirigir a Morena, pueden provocar dolorosos rompimientos, lo que ya motiva razonable preocupación al líder máximo Andrés Manuel López Obrador.

Lealtad a ciegas pide el Presidente

A su gabinete, legisladores y correligionarios para construir el proyecto de transformación, y al mismo tiempo se dirige a sus adversarios y conservadores, a los gobernadores de los estados, que eviten el derroche y no desviar los recursos presupuestales para las elecciones 2021. Asegura que todos los estados han recibido el presupuesto federal que les corresponde, pero en el caso de Zacatecas, Alejandro Tello acaba de precisar que solo ha recibido 300 millones, no hay cumplimiento al compromiso de mil millones más. Pero lo cierto es que, ese perseverante regateo del gobierno federal al estado, tiene que ver con la estrategia político electoral, o sea, impedir que se tengan recursos para aplicarlos en apoyo a partidos y candidatos, es el sospechosismo que le permite justificar, decirles que no hay más dinero.