Ahora sí que la nueva gobernanza tiene que comenzar a brillar para reflejar no solo los hechos que ya se derivan desde la federación, sino para también hacer ciertas y reales las acciones estratégicas, los programas y fórmulas eficaces que den sentido al asentamiento y esencial configuración de la Cuarta Transformación en Zacatecas, por ser un compromiso a cumplir de inmediato y corresponsablemente con la sociedad para afrontar la emergencia social y dar pasos certeros y adelante hacia la paz y tranquilidad.
Si la etapa de la Revolución ya se agotó, debe ser en serio que la nueva gobernanza construya los testimonios de la transformación sin renunciar a avanzar en la modernidad y nunca retroceder al arcaico ejercicio autoritario del poder y, para más pronto convencer hay que contener la violencia y reconquistar espacios de seguridad.
David Monreal ya debe edificar los grandes cambios y hacerlo con la firme consolidación del Estado y como Poder Ejecutivo, tiene que incorporar a los Poderes Legislativo y Judicial; deberá integrar a los Poderes Municipales sin distinción de colores o tendencias ideológicas; exigir a los legisladores federales zacatecanos, senadores y diputados, que ya decidan contribuir con leyes y sus gestiones a luchar por el interés superior de Zacatecas; y que no haya repliegue ni ceda en la óptima y efectiva coordinación con el gobierno de la República, porque así lo ha ofertado el Presidente Andrés Manuel López Obrador, el auténtico líder de los cambios y la transformación.
En esta hazaña por construir a través de los más grandes ideales humanistas y principios democráticos, no pueden haber omisiones ni exclusiones, al contrario, debe mostrar total y plena apertura a la participación de todos en una verdadera comunión social, que significa atraer a las batallas por el desarrollo integral e integrador, a los sectores productivos, a los empresarios que en Zacatecas son progresistas y nacionalistas; a los académicos, científicos e intelectuales que son creadores e innovadores; a las mujeres y hombres del campo que a diario garantizan alimento a la población; a los esforzados mineros que han proyectado a Zacatecas por el mundo; a los maestros entregados con pasión a la formación de las generaciones; a los servidores turísticos y promotores culturales que elevan a Zacatecas como la Capital Cultural y Turística de Latinoamérica; y claro, a los heroicos migrantes que aportan recursos a la recuperación del estado.
Acertado que en ésta era de la Cuarta Transformación David Monreal continúe su identidad y cercanía con las comunidades y los 58 municipios, que permanentemente se adentre a nuestros valiosos e históricos escenarios, desde Concepción del Oro hasta los cañones de Tlaltenango y Juchipila; desde el altiplano del sureste en Pinos y Loreto, hasta los centros históricos y culturales de Jerez y Nochistlán; mineros y frijoleros de Fresnillo, Río Grande y Sombrerete, para que a todos informe, oriente y clarifique acerca de las metas y objetivos de la Nueva Gobernanza.
