A decir verdad, de este nuevo colectivo de candidatas y candidatos a las diputaciones y ayuntamientos, resaltan nuevos rostros que por frescos o porque sea su primera vez, pueden significar una nueva generación de políticos que harán de la pluralidad política e ideológica una convivencia de más pasiones, firmes convicciones y lealtad a las instituciones, a la legalidad y al perfeccionamiento de la vida democrática entre los zacatecanos. Y también los hay profesionistas y académicos atraídos por impulsar cambios y transformaciones que hagan posible superar las actuales dolencias sociales por la pandemia, violencia e inseguridad y la penuria económica.
Por lo pronto, se advierte que gradualmente quedan atrás los viejos actores, los dinosaurios y los rancios liderazgos que bien gozaron décadas de barata politiquería, de los comportamientos autoritarios, de la verborrea demagógica y de los privilegios del nepotismo, de las cuotas y de los cuates, lo que ahora David Monreal rechaza con práctica renovadora y quehacer político reformador. y parece que ya se abre paso a escenarios de mayor organización, de capacidades administrativas y financieras, de calidad e inteligencia para la planeación, las propuestas y la ejecución de obras gubernamentales y metas legislativas más ambiciosas, de gran calado y con el más amplio sentido y compromiso social.
La gente, los ciudadanos confían en que esa nueva generación de políticos no desestime su actual interés y las potencialidades políticas que buscan poner al servicio de la sociedad. Como sea, es un avance democrático y participativo, que se vean mezclados o conjugados los esfuerzos, creatividad e imaginación de los viejos políticos con los frescos y vigorosos aspirantes que ya hacen campaña con mucha pasión y vibrantes desafíos. Así por ejemplo, en la contienda por la diputación federal del primer distrito de Fresnillo, hay que ver a las experimentadas lideresas Norma Angélica Castorena y Benelly Jocabeth Hernández, una líder del sindicato de salud y de indiscutible lealtad priista; y la otra, fiel seguidora y cuadro de Ricardo Monreal allá en la Ciudad de México. Sin subestimar el desempeño de María Eugenia Bañuelos, del Movimiento Ciudadano; Iris Aguirre, del PES y Celia Flores, de la Fuerza por México.
En el 2 federal de Jerez, la división y dispersión de los históricos grupos jerezanos otra vez se anulan y abren paso al panista Miguel Ángel Varela y Lyndiana Bugarín, por el Verde y los Morenos, ambos del Cañón de Tlaltenango y que de hecho son la dupla que se disputan la estratégica diputación federal. En el tercer distrito de Zacatecas Capital hasta el semidesierto del norte, sobresalen Carlos Peña del PRI; Alfredo Femat, que busca la reelección postulado por su partido el PT, Morena y el Verde; por el Partido Encuentro Solidario, irrumpió con fuerza el famoso Chemel Balderas, y Fabiola Nájera hace batalla de Fuerza por México. Y en el cuarto distrito de Guadalupe hasta el altiplano del sureste, otra vez quiere repetir Samuel Herrera por el PT, que nomás no levanta; en esos horizontes más dominan Julia Olguín de Morena, Carolina Dávila por el PRI, PAN y PRD, y la gran novedad de Sandra Andrade, por el Encuentro Solidario.
La lucha por las 4 diputaciones federales se ve más competida al no aparecer en la boleta el nombre de Andrés Manuel López Obrador, de manera que Benelly Hernández, Lyndiana Bugarín, Alfredo Femat y Julia Olguín, ahora sí que hacen campaña y se la tienen que partir bien y bonito, porque los adversarios están más que decididos a evitar esa mayoría que a la Cuarta Transformación les urge en la Cámara de Diputados. En esta batalla hay más de lo mismo.
