/ miércoles 18 de noviembre de 2020

AMLO, hasta el aturdimiento por su compadre Trump

Le dolió, sí que le consternó a AMLO que Joe Biden le haya ganado a su casi compadre (de AMLO) Donald Trump en la preferencia de los electores de Estados Unidos de América. Fue tal el disgusto que eso le ocasionó a AMLO que siquiera felicitó formalmente a Biden. Más aún, AMLO no quiso tomarle la llamada al presidente electo de los Estados Unidos de América –como si se tratara de un asunto baladí –el que Biden quisiera reforzar los lazos entre su país y el nuestro. Sí, a todos nos quedó claro que AMLO esperaba con ansias, quería, anhelaba con fervor macuspano, que Donald Trump ganara nuevamente la presidencia de Estados Unidos de América.

Aunque no nos gusten las bravatas a muchos mexicanos, pero AMLO es presidente de México, y como tal debe comportarse en su trato con otros países. Es decir, debe tener respeto por lo que la mayoría de los estadounidenses decidieron: esto es, que Biden fuera el nuevo presidente de Estados Unidos de América, y no que Donald Trump siguiera en el cargo.

En lo personal no tengo simpatía alguna hacia Trump, como quiero creer que no la tienen la mayoría de los mexicanos. Y sí, Biden proyecta la imagen de político honesto, templado, respetuoso. Virtudes políticas muy deseables en nuestro trato con nuestros vecinos, especialmente con los del norte, en particular los norteamericanos.

Ya, como sea, Biden tomó públicamente en cuenta que AMLO es inmoderado amigo de Trump, mucho más todavía que de los mexicanos –sus presuntos mandantes –en su conjunto y, presumiblemente, así será el trato que se le dará a nuestro país.

Y sí, no son presunciones los que pretendo formular sino el mismo Biden aseveró: “Yo entiendo que Vladimir Putin, Jair Bolsonaro y Kim Jong-Un no quieran felicitarme aún, ya que son tan parecidos a Trump, pero... ¿por qué AMLO no quiso tomar la llamada que le hice? Recuerdo que cuando nos reunimos en 2012 en la Ciudad de México hubo un tan buen ambiente, que alargamos la plática. Entonces él era precandidato a la presidencia de la República por el PRD y nadie habló de que yo, siendo el vicepresidente de Barack Obama, estuviera interviniendo en el proceso electoral mexicano...”

Así, entonces, lejos de esperar las buenas noticias de que el arribo de Joe Biden a la presidencia de Estados Unidos de América ayudará a los miles de mexicanos que viven y trabajan de manera ilegal en los Estados Unidos de América, deberemos de estar al pendiente de qué otra sandez va a emprender AMLO a ese respecto…


Le dolió, sí que le consternó a AMLO que Joe Biden le haya ganado a su casi compadre (de AMLO) Donald Trump en la preferencia de los electores de Estados Unidos de América. Fue tal el disgusto que eso le ocasionó a AMLO que siquiera felicitó formalmente a Biden. Más aún, AMLO no quiso tomarle la llamada al presidente electo de los Estados Unidos de América –como si se tratara de un asunto baladí –el que Biden quisiera reforzar los lazos entre su país y el nuestro. Sí, a todos nos quedó claro que AMLO esperaba con ansias, quería, anhelaba con fervor macuspano, que Donald Trump ganara nuevamente la presidencia de Estados Unidos de América.

Aunque no nos gusten las bravatas a muchos mexicanos, pero AMLO es presidente de México, y como tal debe comportarse en su trato con otros países. Es decir, debe tener respeto por lo que la mayoría de los estadounidenses decidieron: esto es, que Biden fuera el nuevo presidente de Estados Unidos de América, y no que Donald Trump siguiera en el cargo.

En lo personal no tengo simpatía alguna hacia Trump, como quiero creer que no la tienen la mayoría de los mexicanos. Y sí, Biden proyecta la imagen de político honesto, templado, respetuoso. Virtudes políticas muy deseables en nuestro trato con nuestros vecinos, especialmente con los del norte, en particular los norteamericanos.

Ya, como sea, Biden tomó públicamente en cuenta que AMLO es inmoderado amigo de Trump, mucho más todavía que de los mexicanos –sus presuntos mandantes –en su conjunto y, presumiblemente, así será el trato que se le dará a nuestro país.

Y sí, no son presunciones los que pretendo formular sino el mismo Biden aseveró: “Yo entiendo que Vladimir Putin, Jair Bolsonaro y Kim Jong-Un no quieran felicitarme aún, ya que son tan parecidos a Trump, pero... ¿por qué AMLO no quiso tomar la llamada que le hice? Recuerdo que cuando nos reunimos en 2012 en la Ciudad de México hubo un tan buen ambiente, que alargamos la plática. Entonces él era precandidato a la presidencia de la República por el PRD y nadie habló de que yo, siendo el vicepresidente de Barack Obama, estuviera interviniendo en el proceso electoral mexicano...”

Así, entonces, lejos de esperar las buenas noticias de que el arribo de Joe Biden a la presidencia de Estados Unidos de América ayudará a los miles de mexicanos que viven y trabajan de manera ilegal en los Estados Unidos de América, deberemos de estar al pendiente de qué otra sandez va a emprender AMLO a ese respecto…