La salud mental es fundamental para tener una vida sana por eso nos tenemos que hacer responsable de ella, cuidándola. Un primer aspecto es erradicar los pensamientos negativos, sobre algún tema, que inconscientemente lo favorezcamos, porque pasa que cuando nos ocurre algo, enfocamos toda nuestra energía en lo peor que puede pasar, haciendo que desgastemos nuestro cuerpo en esos pensamientos.
Además debes tener en cuenta que esos pensamientos negativos habitualmente pueden estar alimentados por:
1.- Estado emocional alterado por algún suceso dramático.
2.- Falta de información sobre algún tema, con fantasías catastróficas sobre algún problema.
En este contexto cuando estemos pensando que va a pasar lo peor en nuestras vidas, habrá que respirar profundo, ver si esos pensamientos están basados en algún estado emocional alterado o en información falsa, para auto frenar esa dinámica, y a pesar de la adversidad enfocarnos en lo positivo, aunque en eso momento parezca la opción menos probable.
El pensamiento positivo, nos genera endorfinas, (favoreciendo un estado inmune adecuado) contagia a la gente que está a nuestro alrededor, haciendo un ambiente más constructivo, además de tener una mente clara para poder tener opciones de resolución de las problemáticas.
Así que la próxima vez que te descubras teniendo pensamientos catastróficos, frénate, y educa a tu cerebro a ser positivo y optimista…