Es una realidad que la profesionalización y mejora institucional son no solo necesarias, si no determinantes en su estructura, pues para cualquier municipio ha de ser de suma importancia contar con funcionarios y empleados eficientes, deferentes en su forma de relacionarse con el público, dignificados en su función, conscientes de ser verdaderos servidores públicos en toda la extensión de la palabra.
Señalado lo anterior, es necesario contextualizar que Indudablemente la profesionalización de las y los servidores públicos, es parte del proceso de desarrollo que deben seguir todos los municipios para constituirse en instituciones capaces, que sean eficientes, transparentes e institucionales correspondiendo a los habitantes en general sin distingo alguno.
Pues la institucionalidad es un concepto que debe ser analizado, entendido y adoptado, deben quedar muy claros las metas y objetivos generales de cada dependencia y de cada área en particular, debe generarse la confianza necesaria para saber que cada funcionario tiene un rol que es importante para el conjunto, debe propiciarse un buen clima de trabajo y la seguridad de que cada funcionario, cada empleado, es valorado por su desempeño y ello pesará en su carrera de forma positiva.
De igual manera, los servidores públicos en el desempeño de su trayectoria laboral adquieren conocimientos y habilidades específicas, que son de gran utilidad para el desempeño profesional e institucional, pues es un hecho que, con voluntad y el ejercicio de la función o responsabilidad gubernamental, se van conociendo y aplicando conceptos claves para la gestión pública, que le permitirán desarrollar mejores prácticas en cada uno de los procesos del servicio y atención al público. En donde cada una de las experiencias tanto personales como institucionales, ayudara a incrementar el conocimiento de la institución en que se desenvuelve, aportando al desarrollo de la misma, como proyectos de innovación y desarrollo tecnológico para mejora de la administración y del mismo municipio.
Este proceso va a redundar en un mejor manejo de los conocimientos esenciales de impulso al desarrollo, puesto que todo lo aprendido será de gran utilidad en la conclusión de proyectos, de tal manera que se podrán ofrecer mejores servicios y atención al público, logrando consecuentemente mejores resultados en la administración pública municipal.
Porque es indiscutible que un buen diseño de la estructura administrativa, acompañado de una buena gestión de recursos, en donde se establezca una buena planeación de actividades, recursos humanos y materiales, y que además de todo lo anteriormente expuesto, se realice invariablemente la evaluación y el seguimiento donde se reflejen los resultados de lo realizado, será posible no solo lograr mejores prácticas de gobierno, si no, también se estará abonando a la consolidación de una mejor sociedad, a la construcción de un mejor Municipio, Estado y País.