/ jueves 19 de abril de 2018

Vivencias de un agrónomo

Como les prometí, ya terminé de platicarles y explicar los temas botánicos y de citología que ocurren en la fecundación de las flores del Durazno Prunus pérsica, y que gracias a esos “maravillosos” procesos, nos permiten saborear un rico durazno; sobre todo si es de Jerez. Entonces, cambiamos de tema.

Quizá recuerden ustedes (los que han seguido mis vivencias), que les comenté sobre la invitación que me hizo el Lic. Genaro Borrego Estrada (yo no tenía el gusto de conocerlo) para colaborar en su gestión de gobierno, como Director de Fruticultura (en ningún Gobierno del Estado anterior había existido esta Dirección), adscrito a la Secretaría de Desarrollo Rural Integral (SEDRI), de la cual, el Dr. Gerardo Chávez Guerrero fue el Titular.

Realmente fue un magnífico tiempo. Yo conocía la Fruticultura de Zacatecas - estimo que bien – por mis trabajos y actividades anteriores, y también conocía a muchos fruticultores en las distintas regiones del estado; de modo que me movía “como pez en el agua”. Era mi “mero mole”, como dicen por ahí.

Me dieron la libertad para formar un equipo de trabajo a base de Técnicos y Jóvenes Ingenieros Agrónomos, egresados de la UAZ (algunos habían sido mis alumnos). Así que nos pusimos a trabajar. Ya les platiqué algo de eso.

En líneas anteriores les dije que este período de mi vida profesional fue magnífico. Pudimos realizar, trabajando como equipo, muchas actividades que ya les iré comentando. Y en la medida de lo posible tuvimos libertad y apoyo para ello.

Quiero relatarles que aunque mi cargo solo era de Director, con cierta frecuencia recibía alguna llamada para indicarme que por indicaciones del Gobernador, lo acompañaría en su gira de trabajo por alguna región de importancia frutícola, por ejemplo Jalpa (guayaba), Jerez (durazno), Ojocaliente (vid), Pinos (tuna), etc. Yo le informaba a mi Secretario Dr. Gerardo Chávez Guerrero – para estar en acuerdo. Y en ningún momento hubo celo.

Ya en el autobús, con varios Secretarios y funcionarios, realmente se llevaba a cabo una reunión de trabajo. ¿Qué vamos a ver en el lugar a donde vamos? Así, a cada uno le preguntaba, y tomaba apuntes. De manera que al llegar ya tenía una visión más o menos clara de lo que vería y de las necesidades y planteamientos que le pudieran hacer, para dar respuestas realistas y viables.

El intercambio y participación de todos era muy libre, y por tanto enriquecedor. En ningún momento vi que solo un pequeño grupo tuviera el acercamiento exclusivo con el Gobernador.

Siempre me pareció un buen estilo de gobernar, sin soberbia ni arrogancia, propio de un joven político, con preparación y educación para tal efecto – esa es mi opinión –

En una o dos ocasiones en que fui invitado a acompañarlo – recuerdo que una de ellas fue en Jalpa -, ya estando en la reunión de trabajo; al tratarse sobre la situación de la Guayaba y perspectivas de diversificación frutícola del Cañón de Juchipila, que uno de los asistentes planteó, uno de los ayudantes del Gobernador, me pasó una tarjeta: Jorge: (ya con más confianza), prepare una respuesta e intervención sobre este asunto. Lo cual hice con mucho gusto, y lo más acertado posible. Luego él mismo me agradeció. Le pareció bien.

En posteriores colaboraciones para El Sol de Zacatecas, les seguiré platicando sobre mis vivencias, cuando fui Director de Fruticultura.

Como les prometí, ya terminé de platicarles y explicar los temas botánicos y de citología que ocurren en la fecundación de las flores del Durazno Prunus pérsica, y que gracias a esos “maravillosos” procesos, nos permiten saborear un rico durazno; sobre todo si es de Jerez. Entonces, cambiamos de tema.

Quizá recuerden ustedes (los que han seguido mis vivencias), que les comenté sobre la invitación que me hizo el Lic. Genaro Borrego Estrada (yo no tenía el gusto de conocerlo) para colaborar en su gestión de gobierno, como Director de Fruticultura (en ningún Gobierno del Estado anterior había existido esta Dirección), adscrito a la Secretaría de Desarrollo Rural Integral (SEDRI), de la cual, el Dr. Gerardo Chávez Guerrero fue el Titular.

Realmente fue un magnífico tiempo. Yo conocía la Fruticultura de Zacatecas - estimo que bien – por mis trabajos y actividades anteriores, y también conocía a muchos fruticultores en las distintas regiones del estado; de modo que me movía “como pez en el agua”. Era mi “mero mole”, como dicen por ahí.

Me dieron la libertad para formar un equipo de trabajo a base de Técnicos y Jóvenes Ingenieros Agrónomos, egresados de la UAZ (algunos habían sido mis alumnos). Así que nos pusimos a trabajar. Ya les platiqué algo de eso.

En líneas anteriores les dije que este período de mi vida profesional fue magnífico. Pudimos realizar, trabajando como equipo, muchas actividades que ya les iré comentando. Y en la medida de lo posible tuvimos libertad y apoyo para ello.

Quiero relatarles que aunque mi cargo solo era de Director, con cierta frecuencia recibía alguna llamada para indicarme que por indicaciones del Gobernador, lo acompañaría en su gira de trabajo por alguna región de importancia frutícola, por ejemplo Jalpa (guayaba), Jerez (durazno), Ojocaliente (vid), Pinos (tuna), etc. Yo le informaba a mi Secretario Dr. Gerardo Chávez Guerrero – para estar en acuerdo. Y en ningún momento hubo celo.

Ya en el autobús, con varios Secretarios y funcionarios, realmente se llevaba a cabo una reunión de trabajo. ¿Qué vamos a ver en el lugar a donde vamos? Así, a cada uno le preguntaba, y tomaba apuntes. De manera que al llegar ya tenía una visión más o menos clara de lo que vería y de las necesidades y planteamientos que le pudieran hacer, para dar respuestas realistas y viables.

El intercambio y participación de todos era muy libre, y por tanto enriquecedor. En ningún momento vi que solo un pequeño grupo tuviera el acercamiento exclusivo con el Gobernador.

Siempre me pareció un buen estilo de gobernar, sin soberbia ni arrogancia, propio de un joven político, con preparación y educación para tal efecto – esa es mi opinión –

En una o dos ocasiones en que fui invitado a acompañarlo – recuerdo que una de ellas fue en Jalpa -, ya estando en la reunión de trabajo; al tratarse sobre la situación de la Guayaba y perspectivas de diversificación frutícola del Cañón de Juchipila, que uno de los asistentes planteó, uno de los ayudantes del Gobernador, me pasó una tarjeta: Jorge: (ya con más confianza), prepare una respuesta e intervención sobre este asunto. Lo cual hice con mucho gusto, y lo más acertado posible. Luego él mismo me agradeció. Le pareció bien.

En posteriores colaboraciones para El Sol de Zacatecas, les seguiré platicando sobre mis vivencias, cuando fui Director de Fruticultura.

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