Pues, como les platiqué la semana pasada, regresé de Querétaro, allá por finales de 1988 con el nombramiento de Delegado para Zacatecas de la Comisión Nacional de Fruticultura. Ahora, por intervención del Lic. Genaro Borrego Estrada, Gobernador del Estado, me tocaría coordinar los trabajos de la Dirección de Fruticultura y de la Delegación Estatal de CONAFRUT.
Varios eran mis sentimientos. Por una parte contento por ser esto un reconocimiento al trabajo que estábamos haciendo en la DIRFRUT – Gobierno del Estado; por otra parte, ante la perspectiva de impulsar la Fruticultura estatal con más personal técnico y recursos. Pero por otra, preocupado, ya que la experiencia de unir dos instituciones que tienen reglamentaciones, normas de operación, y hasta cierto punto costumbres y hábitos (por no decir vicios) distintos, siempre ha sido, y sin duda será difícil.
A mi regreso a Zacatecas, informé al Gobernador de la conversación que tuve en Querétaro con el Lic. Francisco Márquez Aguilar, Director General de CONAFRUT; y le dije que yo estaría al pendiente del día en que viniera el personal para hacer el relevo en la Delegación Estatal.
Yo creo que él advirtió mi preocupación, de manera que simplemente me dijo “no le saque”; todo será para bien de la Fruticultura y de los fruticultores; y además cuente conmigo para apoyarlo en lo que se requiera.
Pues bien, ya animado, me despedí. Ya esperar el aviso de oficinas centrales de CONAFRUT. Por lo pronto guardé discreción sobre el asunto, hasta que fuera oficial el relevo. A la única que le comenté de lo que estaba pasando fue a Ernestina Mauricio (QEPD), mi fiel y eficiente secretaria y asistente, pues ella, conociéndome ya percibía que algo “traía entre manos”.
En el transcurso de la espera para el mencionado relevo, me puse a estudiar algo sobre la CONAFRUT. El propósito de esta institución fue ordenar y apoyar a este Subsector de la Agricultura Nacional, por cierto muy especializado, potencialmente productivo, propiciador de la agroindustria y la exportación; así como generador de empleos. Pero necesitado de personal técnico especializado, y de soluciones técnico-científicas mediante la investigación, para resolver los problemas que cada especie frutal presenta.
Mis dos maestros de Fruticultura en Chapingo, el Ing. Emilio Brom Rojas y el Ing. Estéban Calderón me dieron un panorama muy amplio de la riqueza de especies frutícolas que se cultivan y se pueden cultivar en México, dada nuestra muy amplia diversidad agroclimática. Desde las especies caducifolias de clima frío (manzana, peral, nogal) en el norte. Las especies subcaducifolias (durazno, chabacano, ciruelo, vid, guayaba, higo, olivo, berries) en el centro. Las especies perenifoias de clima subtropical y tropical (mango, aguacate, persimonio, plátano, granado, papaya, cítricos, litchi, guanábana, mamey, zapotes, cítricos), en las franjas costeras de los dos litorales y en el sureste. De tal manera que consideré a la CONAFRUT como un acierto.
Reflexionando sobre esta riqueza frutícola de México, caigo en cuenta que pocos países la tienen. Chile pudiera acercarse, su fruticultura de clima templado y frio es muy rica, altamente tecnificada y competitiva en los mercados mundiales; pero su fruticultura tropical es limitada. Brasil tiene una enorme riqueza en fruticultura tropical, pero no tanta en cuanto a especies de clima frio (solo algo en el sur). E.U.A. tiene gran riqueza frutícola en el Oeste (California, Oregon, Washington), pero no tanta en especies tropicales (solo en Puerto Rico) . . . . y China es otro mundo aparte.
CONAFRUT fue dirigida por magníficos técnicos. Uno de ellos fue el Ing. Salvador Sánchez Colín, que en su tiempo impulsó las actividades técnico-científicas y de extensionismo de la institución a favor de la Fruticultura y de los fruticultores. En Zacatecas, la delegación de CONAFRUT estuvo dirigida con acierto y pasión profesional de 1975 a 1985 por el Ing. Joaquín Octavio Cortés Bañuelos (buen amigo).
Bueno, la próxima semana comienzo a platicarles sobre mis vivencias en la fusión de la Dirección de Fruticultura y la Delegación Estatal de CONAFRUT.
